EL CELTA

Bar situado en las esquinas de Sarmiento y Rodríguez Peña
Con una larga historia desde 1941, cuando su primer dueño Don Claudio Fernández, un asturiano, que lo bautizó con ese nombre como homenaje a la cultura Celta afincada en esa región.
Nueve años después de su fundación, don Fernández lo vendió y el lugar se convirtió en confitería bar, hasta que cerró.
A mediados de los '90 reabrió sus puertas, convertido en un reducto de Jazz de altísimo nivel, etapa que cumplió su ciclo y cerró nuevamente.
En el 2012, volvió a abrir sus puertas.
Este comentario, lo hago pues luego de la operación en una de mis piernas, con una prótesis, estoy aprendiendo a caminar, a sostenerme, a mantener el equilibrio. En mis prácticas de andar con la ayuda de mi bastón, es que me llego hasta El Celta, me siento a una de sus mesas y Yamila o Darío, quienes atienden las mesas, traen el cortado solicitado por mí y a partir de ese momento me dispongo a disfrutar de un Buen Estar, con la lectura del libro que lleve en ese momento.
Es un lugar tranquilo, con una historia en el mundo de la cultura, y una ambientación agradable. viejas mesas de madera, piso de pinotea, estanterías hasta el techo.
Sí, mi nuevo lugar de estar. donde, seguramente me encontraré con muchas personas amigas, y con ellas, tendremos buenas conversaciones.